Hemos encontrado fallas prematuras causadas por el desgaste de los discos de fricción de nuestros frenos húmedos y no podemos encontrar la fuente de la falla. ¿Tiene alguna idea de por qué ocurre el desgaste prematuro?
Cuando se trata de frenos húmedos, el aceite sirve para muchos propósitos diferentes dentro de la carcasa, como enfriar el conjunto, reducir el desgaste excesivo y la fricción, y proporcionar un medio hidráulico para que los frenos funcionen correctamente. Si las propiedades del aceite se ajustan a las necesidades del equipo, las superficies internas de la máquina deben protegerse y producir una vida satisfactoria. En este caso, los discos de fricción fallan debido a algún tipo de mecanismo de desgaste excesivo. Su primer paso debe ser determinar qué tipo de desgaste está teniendo lugar.
Teniendo en cuenta la naturaleza deslizante de estos discos, un mecanismo de desgaste prominente que podría estar involucrado es el desgaste adhesivo. Esto se caracteriza por grandes trozos de material en forma de plaquetas que se transfieren de una parte de la máquina a otra. Puede ser provocado por una variedad de factores, pero todos consisten en la falta de una película lubricante del tamaño adecuado. Si los discos aparecen soldados entre sí, este es el mecanismo de desgaste en juego. Incluso si tiene el tipo aceite correcto, la viscosidad puede no ser la correcta. Si la viscosidad es demasiado baja, este patrón de desgaste se vuelve mucho más pronunciado. El desgaste abrasivo también es común en las áreas de contacto deslizante.
Puede ser causada por una superficie rugosa que penetra en una superficie más blanda, conocida como desgaste de dos cuerpos, o que una partícula queda atrapada entre dos superficies deslizantes y corta en ellas, lo que es un desgaste de tres cuerpos. El desgaste abrasivo se caracteriza por marcas or asguños en los componentes de la máquina. Si los discos tienen arañazos y cortes excesivos, se trata de una falla abrasiva. Para mitigar esto, debe eliminar las partículas sólidas. Verifique que tenga instalados los filtros adecuados y haga todo lo posible para descontaminar el aceite antes de que entre en servicio.
Si el desgaste aparece como picaduras o las superficies están decoloradas, puede deberse a corrosión. A medida que los aceites se oxidan, producen ácidos más fuertes que a su vez pueden dañar las partes más blandas de la máquina. Si no se controla, estos ácidos pueden provocar daños significativos. Cuando cambie el aceite, busque signos de oxidación, como el oscurecimiento del aceite, un aumento de la viscosidad y un olor a aceite quemado. Todos estos son indicadores de que el intervalo de drenado de aceite es demasiado largo.
Además, asegúrese de utilizar los aditivos de aceite correctos según el material del que están hechos los discos. Algunos discos de fricción se fabrican a partir de aleaciones de metales más blandos. Si este es el caso, debe evitar cualquier aceite con aditivos de extrema presión (EP). Estos aditivos son químicamente agresivos y exacerban el desgaste corrosivo.
Finalmente, un contaminante subyacente que puede afectar a estas tres formas de desgaste es el agua. Si el aceite está contaminado con agua, el desgaste será mucho más frecuente, lo que puede reducir la vida útil del equipo. Puede tomar una muestra del aceite y enviarla a analizar un laboratorio o realizar una simple prueba de crepitación para ver si hay agua presente. Si es así, deberá deshidratar el aceite o reemplazarlo con uno que esté limpio, seco y saludable. Asegurarse de que se cumplan todos estos criterios lo ayudará a lograr una vida útil más larga para sus componentes.
Noria Corporation. Traducido por Roberto Trujillo Corona, Noria Latín América.