Estamos tratando de diseñar un robusto programa de reengrase en nuestra planta. ¿Pueden aconsejarnos cómo seleccionar la frecuencia y la cantidad de grasa para cada aplicación (tamaño del rodamiento, velocidad, temperatura, etc.)? Hasta el momento, estamos haciendo pruebas con una pistola de ultrasonido, pero a menudo los rodamientos son engrasados en exceso.
Para responder esta pregunta, primero debe recopilar toda la información necesaria para entender las condiciones en las que está trabajando la grasa en cada aplicación.
Para calcular la cantidad de grasa a utilizar en el reengrase, necesita las dimensiones físicas del rodamiento (principalmente el diámetro exterior y el ancho). Una vez que tiene las medidas (en milímetros), debe multiplicarlas entre sí y a continuación multiplicarlas por 0.005 (Figura 1). Esto le proporcionará la cantidad de grasa a aplicar en gramos. Para obtener la cantidad de grasa en onzas, tome las mismas dimensiones en pulgadas y utilice el factor 0.114 en lugar de 0.005. Esta fórmula trabaja para todo tipo de rodamiento y es ampliamente aceptada como la mejor manera para calcular la cantidad de grasa a utilizar en el reengrase.
Figura 1 – Cálculo de la cantidad de grasa a aplicar durante el reengrase en rodamientos
Una vez que se ha calculado el volumen de grasa, necesita determinar con qué frecuencia debe aplicarla. Este cálculo es más complejo. Debe investigar las condiciones de operación y algunos datos del rodamiento.
Se sabe que la temperatura afecta tanto a la grasa como al aceite, por lo que naturalmente ese es uno de los primeros factores a considerar. Mientras más caliente esté el ambiente, con más frecuencia debe reponerse la grasa. La contaminación en el ambiente (qué tan sucio está) y la humedad (qué tan húmedo está el ambiente) trabajan de manera similar. Mientras más húmedo y sucio sea el ambiente, con más frecuencia debe engrasarse el rodamiento.
Cosas tan simples, como la posición física del rodamiento y la vibración, también afectarán el escurrimiento de la grasa y por ende la frecuencia de re-engrase. Si el rodamiento está montado sobre un eje en posición vertical, la grasa tendrá una mayor tendencia a escurrir del rodamiento que si estuviese montado sobre un eje en posición horizontal. Cuando el rodamiento está sujeto a vibración, el aceite contenido en la grasa se separa con más facilidad del espesante, ocasionando que drene con mayor rapidez en lugar de estar en donde se necesita. Por lo anterior, deben tomarse en consideración ambos factores de corrección (posición y vibración).
El último factor de corrección es la construcción o tipo de rodamiento. Esto es importante porque cada elemento estresa a la grasa de manera diferente. Por ejemplo, un rodamiento de bolas agita la grasa de manera diferente que uno de rodillos esféricos, pues este último la batirá de forma mucho más intensa.
Una vez que se han seleccionado cada uno de los factores correspondientes, se necesita el diámetro interior del rodamiento y la velocidad a la que trabaja (rpm). En la figura 2 se muestran esos factores de corrección y la fórmula de cálculo. Aplicando matemáticas simples, obtendrá la frecuencia de re-engrase en horas. Esta cantidad de grasa y frecuencia de re-engrase le servirán como punto de partida para poco a poco ir afinando su programa de lubricación por ultrasonido hasta tener la frecuencia y nivel óptimo.
Figura 2 – Cálculo de la frecuencia de reengrase en rodamientos
Noria Corporation. Traducido por Roberto Trujillo Corona, Noria Latín América.