Para que un completo y apropiado programa de lubricación trabaje efectivamente y proporcione el mayor retorno de inversión, debe tomarse en cuenta cada paso, desde la recepción hasta la aplicación. A lo largo del camino, se dejan pasar oportunidades para aumentar la productividad y confiabilidad de la maquinaria y maximizar los retornos de inversión en un programa de lubricación diseñado profesionalmente. Una de las oportunidades más grandes y costosas que se desaprovechan es el correcto almacenamiento y manejo de lubricantes. Con los avances de la tecnología en el área de almacenamiento de lubricantes, usted puede encontrar los sistemas de almacenamiento que se adecuen a sus necesidades, desde un recipiente hasta un completo sistema de almacenamiento con filtración.
Muchas organizaciones no están conscientes del peligro que involucran las prácticas inadecuadas del manejo de lubricante y la inevitable repercusión que tienen sobre la confiabilidad de la máquina y su ciclo de vida. La lubricación correcta no se trata sólo de la cantidad, lugar y momento correctos; también se requiere mantener al lubricante limpio, seco, fresco y bien identificado. Las siguientes secciones explicarán de manera general las mejores prácticas para el manejo y almacenamiento del lubricante.
Figura 1. Un sistema de filtración con tubería rígida trabaja mejor en conjunto con un sistema de almacenamiento tipo estantería.
Manejo y Almacenamiento de Lubricantes.
La primera área de un sistema de almacenamiento y manejo de lubricantes que requiere de atención es el almacén de lubricantes. Sin importar si almacenamos lubricantes en tanques de 40,000 litros o en tambores de 208 litros, es muy importante que nos aseguremos que la calidad del lubricante no sea afectada por contaminantes o presente asentamiento de aditivos. Para asegurarnos que los lubricantes estén en óptimas condiciones, determine cuánto lubricante puede ser almacenado a la vez. Para ayudarnos en este proceso se pueden emplear los siguientes pasos:
- Determinar la tasa de consumo de lubricante. El consumo variará considerablemente dependiendo del tipo de industria y equipo. Para asegurar que se almacenan las cantidades correctas de lubricante, debe determinar la tasa de consumo. Hay muchos factores que influyen en el consumo, que van desde las fugas hasta un exceso de tareas de cambio de aceite.
- Determinar la capacidad de almacenamiento de lubricante. La capacidad requerida de almacenamiento de lubricante depende del consumo, pero a menudo, hay muy poco o demasiado lubricante almacenado en un momento dado. La capacidad de almacenamiento apropiada debe maximizar la vida de anaquel del lubricante por arriba de cierto porcentaje en productos críticos para mantenerlos almacenados para situaciones de emergencia.
- Determinar los tiempos de respuesta del proveedor. Los tiempos de respuesta del proveedor deben usarse como un indicador que ayude a determinar la cantidad de lubricantes a almacenar. Si el tiempo de entrega es corto, podrá almacenarse una pequeña cantidad de lubricantes en sitio; pero si los tiempos de entrega son largos, la cantidad de lubricantes almacenados en sitio deberá ser mayor.
Una vez determinada la tasa de consumo y la capacidad de almacenamiento, decida qué tipo de contenedores utilizará. La medida correcta de los contenedores a usar está en función de la tasa de consumo y la capacidad de almacenamiento. Si se determina una alta tasa de consumo, un tanque a granel dará los mejores resultados; en cambio, si el consumo promedio es bajo, un sistema de almacenamiento del tipo estantería o tambores de 208 litros le darán mejor resultado.
Figura 2. Este es un buen ejemplo de correcto almacenamiento de tambores para uso en interiores y exteriores.
Cualquiera que sea el contenedor que elija, la mejor práctica es filtrar el aceite nuevo al llenar el sistema de almacenamiento. Haciendo esto reducirá la cantidad de contaminantes que vengan con el aceite nuevo. Efectúe filtración periódica para mantener los niveles de limpieza ISO y agítelos regularmente para prevenir la sedimentación de aditivos. La filtración periódica es una buena práctica para garantizar la frescura y limpieza del aceite que utilizará en rellenos y cambios de aceite. Los dos principales métodos para filtración de aceite a granel son los sistemas de filtración con tubería rígida y los carros de filtración. Los sistemas de filtración con tubería rígida trabajan mejor en conjunto con sistemas de almacenamiento tipo estantería (figura1), y los carros de filtración son mejores para tambores.
Observe en la figura 1 que cada contenedor está equipado con un respirador, mirilla de nivel, filtro, etiqueta de identificación del lubricante, conectores rápidos y línea dispensadora dedicada por tipo de lubricante. Este sistema asegura que los lubricantes se mantengan en condiciones óptimas para cuando sean requeridos y también que se despache el producto correcto para cada aplicación.
Cuando se usan tambores de 208 litros, se puede tomar el mismo enfoque para el control de contaminación. Cada tambor puede equiparse con respirador, mirilla de nivel, conectores rápidos, etc. Efectúe filtración periódica usando carros de filtración dedicados para cada tipo de lubricante. La figura 2 es un buen ejemplo de almacenamiento apropiado de tambores para su uso en interiores y exteriores.
Una vez establecido el sistema apropiado para almacenamiento, debemos considerar el método de transportación y aplicación del lubricante a las máquinas. El mejor método para el relleno es utilizar un contener apropiado que esté sellado al medio ambiente, que cuente con una boquilla despachadora, bomba manual, etc. (Figura 3). Si se toman atajos en esta etapa, estaremos desperdiciando el tiempo y esfuerzo que invertimos en diseñar el sistema de almacenamiento y el aseguramiento de la calidad del lubricante con filtración. En muchas ocasiones, la mayor contaminación del aceite se da entre el momento de llenado del contenedor y la aplicación del lubricante a la máquina.
También, cuando se transfiere el lubricante del sistema de almacenamiento al contenedor de relleno, la mejor práctica es filtrar el lubricante. Esto puede ser fácil si se emplea un sistema fijo de filtración integrado al sistema de almacenamiento tipo estantería, como en la figura 1, equipado con boquillas dedicadas por tipo de lubricante. Si usa tambores de 208 litros, instale conectores rápidos, una bomba manual y un filtro en línea para alcanzar el mismo objetivo.
Figura 3. Contenedor de relleno
Almacenamiento y Manejo de Grasas
Almacenar grasas es más fácil que almacenar aceite, debido a que no existen los riesgos de transporte y contaminación. Los contenedores de grasa están sellados de fábrica y permanecen libres de contaminación hasta la puesta en servicio. Una vez que la grasa es abierta y puesta en servicio, ya sea para aplicarla a una pistola de engrase o un sistema automático de engrase, se vuelve a almacenar apropiadamente, si es necesario, para evitar su contaminación. Un método es utilizar contenedores para almacenamiento de grasa. Estos contenedores son particularmente buenos para resguardar cartuchos de grasa parcialmente usados y mantener limpia y seca la grasa.
Otra forma de almacenar cartuchos de grasa, nuevos o usados, es guardarlos en un gabinete (Figura 4). Aun cuando guarde los cartuchos de grasa usados dentro de un gabinete, debe utilizar los contenedores para almacenamiento de grasa. Los gabinetes son excelentes para asegurar que los cartuchos de grasa y los contenedores se mantengan libres de contaminación y daños físicos. Además, si los gabinetes están ubicados correctamente promueven su uso haciendo que los contenedores y tubos de grasa sean fácilmente accesibles.
Ciclos de Vida del Aceite y Grasa
Para aceites y grasas debemos tener en cuenta sus respectivas vidas en almacenamiento. Exceder la vida en almacenamiento recomendada por el fabricante de equipo original (OEM, por sus siglas en inglés) puede inutilizar un producto o afectar severamente su desempeño. Por esta razón, se recomienda aplicar el método de PEPS (Primeras Entradas, Primeras Salidas). Esto simplemente requiere que el profesional de mantenimiento use primero los lubricantes que entraron en primer lugar al almacén. Con esto aseguraremos que los lubricantes no excedan si vida recomendada de almacenamiento.
Figura 4. Los gabinetes proporcionan buen espacio para almacenar cartuchos de grasa y contenedores de relleno.
Identificación y Etiquetado
A menudo se pasa por alto el etiquetado del lubricante en el proceso de almacenamiento y manejo. El etiquetado es tan importante como la filtración periódica. Sin el etiquetado apropiado es muy fácil que ocurra la contaminación cruzada entre lubricantes. La contaminación cruzada del lubricante es el resultado de mezclar dos lubricantes, y puede ocasionar problemas devastadores. Esto sucede con más frecuencia en los equipos de despacho que en los de almacenamiento de lubricante.
Un sistema de etiquetado es un concepto simple, pero puede ser difícil implementarlo y mantenerlo. Usted debe determinar cómo etiquetar cada lubricante. Puede ser con un sistema de colores, un sistema alfanumérico que resalte datos importantes del desempeño del lubricante, o una combinación de ambos.
Cualquier sistema de etiquetado puede asegurar que el lubricante correcto sea usado en la aplicación correcta y prevenir la contaminación cruzada. Pero para hacer esto, el sistema debe de ser consistente y actualizarlo con los lubricantes actualmente en uso y los que se mantienen en almacenamiento.
Noria Corporation. Traducido por Roberto Trujillo Corona, Noria Latín América.