En el campo del mantenimiento industrial y la confiabilidad, es seguro asumir que somos el tipo de personas que disfrutan de algo frío un viernes después de una ardua semana de trabajo. Al principio, no me gustaba mucha la espuma en mi cerveza, y muchos otros piensan de la misma manera. Después de un poco de investigación, aprendí que realmente quiero un poco de espuma encima de mi cerveza; ya que realza el sabor de la cerveza al producir diferentes aromas y perfiles de sabor que no existirían en una cerveza plana y sin aire. También proporciona un poco de aislamiento para mantener la bebida fría por más tiempo. En un aceite industrial, algo de aire en el aceite es bastante común. Sin embargo, la espuma suele ser un problema y no debería aparecer en su aceite industrial. La espuma puede provocar una gran variedad de problemas diferentes y, a diferencia de la cerveza, no tiene propiedades de mejora para el aceite.
La espuma es extremadamente difícil de manejar. Puede dar lugar a lecturas falsas del nivel de aceite y una disminución general del desempeño, lo que puede provocar que la máquina sufra un bloqueo por aire. Pequeñas cantidades de espuma no son necesariamente perjudiciales, pero si no se controlan, en última instancia, pueden provocar fallas. La espuma siempre es un problema cuando el nivel de aceite ya no se puede controlar o cuando la espuma está lubricando en lugar del aceite mismo.
Cuatro Fases del Aire en un Aceite Industrial
Aire libre
El aire libre es el que a menudo se encuentra en el espacio superior de un depósito, pero también puede quedar atrapado dentro del sistema en varios lugares. El aire libre puede ser especialmente problemático en sistemas que dependen de la presión del fluido para funcionar (es decir, un sistema hidráulico). Si las líneas de freno de su automóvil o camión tienen aire libre atrapado en la línea, producirá un pedal de freno esponjoso; aplique la misma lógica a un sistema hidráulico. También puede provocar un bloqueo de vapor y restringir el movimiento del fluido.
El aire libre es el que aún no se ha mezclado con el aceite. Este aire entra y sale del depósito con bastante facilidad, a través del respiradero, el sello de laberinto o incluso una fuga de aire en el depósito. El aire libre es también el aire más fácil de eliminar.
Aire disuelto
El aire disuelto es muy común en la mayoría de los aceites. Esto es cuando las burbujas de aire son microscópicas; no son detectables a simple vista. Una cosa a tener en cuenta sobre el aire disuelto es que el aceite debe desgasificarse antes de realizar cualquier conteo óptico de partículas, ya que puede causar una lectura falsa. Los altos niveles de aire disuelto también pueden conducir a una mayor tasa de oxidación.
Aire atrapado
Por lo general, este es el peor de los casos. Sabrá cuándo hay aire arrastrado en el aceite: el aceite se verá lechoso y muy descolorido. Esto ocurre cuando tiene pequeñas burbujas de aire suspendidas en todo el fluido. Estas burbujas tardan mucho en subir a la superficie y producen un aceite más esponjoso. El aire atrapado puede provocar cavitación, microdieseling y muchos otros problemas graves.
Espuma
La espuma generalmente es causada por sobrellenado, aceite con malas propiedades de manejo del aire, contaminación o problemas mecánicos. Volviendo a la analogía del aceite de automóvil, si llena en exceso el cárter de un motor, se volverá cremoso y espumoso, ejerciendo una presión excesiva sobre el cigüeñal y provocando más problemas y más dañinos.
Hay algunas formas en las que podemos excluir, eliminar e intentar prevenir la entrada de aire en nuestros aceites industriales. La mayoría de los aceites industriales de calidad en estos días tendrán algún tipo de aditivo antiespumante. Los aditivos a base de silicona y los copolímeros de acrilato son tipos comunes de antiespumantes (no hay incompatibilidad entre los dos, si se lo pregunta). Sin embargo, los copolímeros de acrilato son bastante sensibles a ciertos contaminantes polares, lo que los hace un poco menos efectivos después de un período de tiempo determinado.
En cuanto a la eliminación, realmente depende de la fuente de entrada de aire. La mayoría de las veces, si la entrada de aire es lo suficientemente agresiva, podría indicar una configuración incorrecta de la maquinaria. Las siguientes son causas comunes de la entrada de aire:
- La línea de retorno está por encima del nivel de aceite (provocando salpicaduras y el atrapamiento de ese aire)
- Depósito demasiado pequeño
- Nivel de aceite inadecuado en las cajas de engranajes
Además de los aditivos y la configuración adecuada, existen métodos mecánicos para controlar el aire en nuestro aceite, como deflectores, difusores y mallas de alambre en las líneas de retorno. A menudo enseñamos en nuestras clases del cruso de lubricaicón de maquinaria y análisis de aceite a estar atentos con ACAM (agua, calor, aire y metales catalíticos). Si somos capaces de controlar el aire atraPAdo, a menudo podremos controlar los problemas de espuma. Tratar de mantener el aceite saludable y minimizar la turbulencia en el reservorio son factores clave que deben analizarse siempre que exista un problema de espuma.
Noria Corporation. Traducido por Roberto Trujillo Corona, Noria Latín América.