Noria Corporation. Traducido por Roberto Trujillo Corona, Noria Latín América
Es importante que el tema de la “vida” del aceite prevalezca en las conversaciones en el ambiente industrial actual. Es sorprendente escuchar a la gente decir que “el aceite no se echa a perder, simplemente se ensucia”. Tal afirmación implica que con solo eliminar la “suciedad” del aceite el aceite durará para siempre, pero esto no es cierto. A menos que su instalación esté utilizando un sistema avanzado de regeneración de aceite que elimine incluso las partículas de la oxidación a nano escala del aceite, es inexacto pensar que el mismo aceite se puede usar una y otra vez sin consecuencias. Las partículas y otros contaminantes se acumulan en el aceite con el tiempo. La oxidación, la degradación de la base lubricante y el agotamiento de los aditivos contribuyen a que el aceite “se eche a perder”.
Otros han discutido los efectos de los contaminantes en la falla y el desgaste de la máquina, pero los efectos de la contaminación y la degradación de los lubricantes en sí también son bastante severos.
En general, todos los lubricantes en servicio fallarán en algún momento (a menos que se regeneren los lubricantes). Dicho esto, existen numerosas formas de controlar la condición de un aceite lubricante y extender su vida significativamente. Hay tres causas principales que hacen necesario un cambio de aceite: degradación de la base lubricante, agotamiento de los aditivos y contaminación.